Entretenidos desafíos y valiosos aprendizajes a nivel espiritual fueron algunas de
las vivencias del club de jóvenes Conquistadores Shekinah de la Iglesia Adventista
del Séptimo Día de la La Villa El Palqui en el Camporí Nacional realizado durante
el mes de febrero en la ciudad de Chillán. Y es que este grupo de jóvenes se
adjudicaron una subvención municipal extraordinaria de $800.000 para costear
algunos gastos de su viaje a la región de Ñuble, permitiéndoles garantizar la
participación en esta importante celebración.
Para el Pastor José Pradines, el Camporí Nacional es un importante encuentro
que reúne a jóvenes conquistadores desde Arica a Punta Arenas para compartir
en sana convivencia y conocer otras realidades “los niños van para compartir
tanto con otros conquistadores, con 6 mil conquistadores de todo el país,
así que se conocen, cantan y comparten todos juntos en estas actividades y
eso es muy motivador para ellos seguir participando. Siempre ese un desafío
ir a un lugar lejano, porque hay un costo asociado, los niños habían pagado
la inscripción para cubrir gastos de alimentación y nos faltaba un poquito
para pagar la cuota del bus y nos recomendaron vayan al municipio,
acérquense a ellos, porque pueden ayudarlos e hicimos las gestiones y, Dios
mediante, fue posible concretarlo”.
La actividad, que congregó a más de 6 mil conquistadores de todo el país, fue un
momento de especial conexión de este grupo de jóvenes oriundos de la comuna
de los valles generosos con otros grupos de Chile que se divirtieron en distintos
desafíos y deportes al aire libre “Para mí fue un sueño estar en el Camporí
Nacional porque era algo muy esperado. Lo pasamos muy bien y fue muy
emocionante, porque todos estamos en la misma sintonía; todos venimos a
adorar a Dios, a pasarla bien, a disfrutar de las actividades y ser felices.
Estamos todo el año practicando para los Camporí por ejemplo, realizamos
nudos, en el club conquistadores aprendemos cosas de supervivencia y así
nos evalúan y aprendemos De Dios y muchas cosas”, señaló María Paz
Araya.
Un espacio seguro para jóvenes
El club de conquistadores Shekinah de la Iglesia Adventista de La Villa El
Palqui, es un lugar donde los y las jóvenes aprenden valores tanto de la vida
espiritual como del diario vivir. En ese sentido, los padres trabajaron arduamente
para reunir recursos, realizando diversas actividades comunitarias. Alejandra
Hernández, madre de una joven que asiste al club conquistadores Shekinah,
indicó Conquistadores es un ambiente protegido, en medio de todos los
problemas sociales, que tengan este espacio para aprender otras cosas y
ver que pueden ser jóvenes en un ambiente tranquilo Un club que es tan
pequeñito le cuesta reunir los fondos para este tipo de actividades, así que
unas felicitaciones no solo a los niños y apoderados que nos involucramos
en esto y quienes están dirigiendo esto de forma valorable, sino también al
municipio en forma especial, porque Conquistadores no es una agrupación
conocida y que el municipio haya puesto los ojos y la confianza y que hoy
tenga la oportunidad de ver cómo se usaron los recursos yo creo que genera
confianza para el futuro para poder trabajar más.
En tanto, desde el municipio, el alcalde Cristian Herrera Peña indicó sentirse muy
contento por los logros de las comunidades juveniles del territorio “feliz de haber
compartido y habernos podido percatar ahí con los videos de las vivencias
que tuvieron los niños, niñas y jóvenes del grupo Conquistadores Shekinah
de La Villa El Palqui con esta subvención. Que le permitió apoyar en algo de
los recursos para que ellos pudieran participar representando a nuestra
comuna en el Camporí Nacional, por lo que pudimos apreciar, fue una
experiencia muy enriquecedora en todos los aspectos espirituales, de vida y
de compañerismo, eso es lo que buscamos como municipio, poder entregar
los aportes a través de subvenciones municipales extraordinarias”.
Si bien queda aún tiempo para el encuentro de los Conquistadores a nivel
latinoamericano, este grupo de jóvenes ya está empezando a trabajar con el fin de
participar de este encuentro deportivo y espiritual.