La Corporación de Asistencia Judicial fue recientemente reconocida por el Servicio
Nacional de la Mujer y la Equidad de Género (SernamEG), en la cual su directora,
Priscilla Olivares hizo hace entrega del certificado a la institución por su
compromiso en el cierre de intervención y la exitosa implementación del modelo
de buenas prácticas laborales con equidad de género.
El modelo de buenas prácticas laborales con equidad de género tiene como
objetivo promover un cambio cultural dentro de las organizaciones, tanto públicas
como privadas, favoreciendo el ingreso, permanencia y desarrollo de las mujeres
en espacios laborales de calidad.
Al respecto, la seremi de Justicia y Derechos Humanos, María José Rojas Erbetta,
señaló “como parte del sector justicia, celebramos el compromiso que hace la
Corporación de Asistencia Judicial, que no solo implementa buenas prácticas
laborales, sino que también da un paso firme hacia la equidad de género en sus
espacios. Acciones como estas impulsan un cambio cultural que fortalece al sector
público y a la sociedad en su conjunto”.
Una de las principales acciones destacadas fue la revisión y diagnóstico de las
prácticas y procesos internos realizados por las organizaciones participantes. Este
ejercicio permitió identificar brechas y diseñar planes de acción específicos que
comenzarán a implementarse durante este año.
Marcos López Julio, director regional de la CAJVAL indicó que “en la región de
Coquimbo ha sido una experiencia de un gran aprendizaje ya que los funcionarios
y los directivos hemos podido verificar las brechas existentes y planificar un
trabajo con miras a acortar estas brechas. En consecuencia, al Comité que ha
trabajado en la región le ha implicado un gran trabajo y un gran esfuerzo, así que
estamos esperanzados que estas brechas al interior de nuestra institución se
vayan cada día acortando y así tener un mejor ambiente laboral”.
Cabe señalar que esta iniciativa busca erradicar las brechas y barreras de género
en el empleo, promoviendo la igualdad de oportunidades y la implementación de
herramientas como la Norma Chilena 3262 sobre igualdad de género y
conciliación de la vida laboral, familiar y personal.

