A una semana del Día de la Convivencia Escolar, hoy martes 6 de mayo se realizó el
seminario de presentación de resultados y avances del programa “A Convivir se Aprende”
de la macrozona norte, organizado en la Región de Coquimbo, que además comprende las
regiones de Arica y Parinacota, Tarapacá, Antofagasta y Atacama.
“A Convivir se Aprende” es un programa del Plan de Reactivación Educativa del Ministerio
de Educación, que busca favorecer la convivencia educativa, junto con enfrentar y prevenir
la violencia en los establecimientos educativos que reciben subvención del Estado. Para
lograrlo se busca fortalecer las competencias y habilidades de los equipos de gestión y
convivencia educativa de los establecimientos educacionales.
El Centro de Sistemas Públicos (CSP) de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de
la Universidad de Chile se ha encargado de monitorear y evaluar el impacto del programa
“A Convivir Se Aprende” en su implementación durante los años 2023 y 2024, labor
necesaria para poder realizar un análisis exhaustivo, reflexionar sobre los resultados y
entregar recomendaciones para una implementación exitosa y que cumpla con el objetivo
de mejorar la calidad de la educación en el país.
En la instancia expusieron: Rodrigo Caro Mañao, jefe del Departamento de Educación de la
Región de Coquimbo; María Teresa Ramírez, coordinadora nacional de Convivencia para la
Ciudadanía; Pamela Jervis, académica de la Universidad de Chile y jefa del proyecto
encargado de evaluar y monitorear el Programa; Gabriel Retuert, académico de la
Universidad de La Serena, institución implementadora del Programa en la Región de
Coquimbo; Sebastián Espinoza, encargado de convivencia del Liceo Gabriela Mistral de La
Serena; y Sebastián Benítez, encargado de convivencia del Kids World School de
Coquimbo.
Principales hallazgos
Macrozona norte
● Valoración positiva del Programa: Un 83% de los establecimientos valora
positivamente las jornadas de formación y un 87% la red territorial.
● Desgaste persistente: El desgaste emocional se mantiene como una de las
principales preocupaciones, afectando al 68% en el segundo año de la cohorte 2023.
● Reducción de la violencia entre estudiantes: Se observa una baja significativa en
esta problemática, que disminuye del 74% al 59% entre el primer y segundo año de
la cohorte 2022, y del 68% al 57% en la cohorte 2023.
● Descenso en la percepción de autoeficacia: Se evidencia una caída sostenida en las
dimensiones evaluadas, con la autoeficacia general bajando de 6,08 a 5,94, y la
percepción de colaboración de 6,30 a 6,14 entre el primer y segundo año de la
cohorte 2023.
● Avances en institucionalización de prácticas clave: La resolución pacífica de
conflictos muestra una trayectoria ascendente, con un salto del 29% al 53% de
prácticas institucionalizadas en la cohorte 2023.
Región de Coquimbo
● Reconocimiento al acompañamiento focalizado: Un 68% de los equipos de la
cohorte 2023 (año 2) se declara completamente de acuerdo con el aporte de este
componente a la gestión institucional. Sin embargo, el componente más valorado
corresponde a las redes territoriales (87% de quienes ingresaron el año 2024).
● Tendencia positiva en reducción de violencia: La violencia entre estudiantes cae
significativamente, del 69% al 54% en la cohorte 2023 (año 1 al año 2), mostrando
una mejora en la convivencia educativa.
● Preocupante persistencia del desgaste emocional: Más del 66% de los equipos lo
reporta de forma sostenida en el segundo año de la cohorte 2023.
● Menor uso de sanciones: Se observa una baja pronunciada en la implementación de
sanciones, pasando de 69% a 39% entre año 1 y año 2 de la cohorte 2023.
● Protocolos aún presentes, aunque en descenso: La activación de protocolos alcanza
un 86% en 2023 (año 1), 68% en 2023 (año 2), pero desciende al 63% en la cohorte
2024, evidenciando un cambio en las estrategias empleadas.
● Fortaleza en el trabajo colaborativo: La articulación interprofesional logra un 57% de
institucionalización en la cohorte 2024, superando los registros de la macrozona
(42%).
● Despliegue de prácticas preventivas: Las prácticas institucionalizadas alcanzan un
86% en monitoreo y seguimiento de estudiantes (nivel 1) y 79% en apoyos
focalizados (nivel 2) en 2024 (año 1), reflejando una implementación creciente en
este nivel.
Encuesta de Implementación 2024
Resultados Nacionales
El Programa a nivel nacional se ha implementado en 2.795 comunidades educativas que
corresponde a 1.130.234 personas. La evaluación general del Programa de gestión de
convivencia educativa muestra una valoración predominantemente positiva. En particular:
1. Alta valoración del Programa: El Programa es altamente valorado por las
comunidades educativas participantes. Los componentes percibidos como más
relevantes son las redes territoriales y las jornadas de formación, ambos con cerca
de un 90% de aprobación.
2. Mejores herramientas para la convivencia: Las comunidades educativas indican que
cuentan con más herramientas y conocimientos para abordar la convivencia, y
reconocen que, a partir del Programa, trabajan de mejor manera en sus escuelas y
liceos. En este sentido, el 95% de los participantes afirma haber adquirido más
conocimientos para enfrentar desafíos en esta área.
3. Apoyo para identificar necesidades: El Programa ha favorecido que las
comunidades educativas reconozcan mejor sus necesidades. Un 89% de los
participantes considera que ACSA ha contribuido a mejorar las prácticas de gestión
de la convivencia educativa.
Resultados Macrozona Norte y de la Región de Coquimbo
Alta valoración del Programa
Tanto en la macrozona norte como en la Región de Coquimbo, los componentes mejor
evaluados del Programa en orden son la red territorial, las jornadas de formación y el
acompañamiento focalizado, con niveles de acuerdo (suma de “de acuerdo” y
“completamente de acuerdo”) que superan ampliamente el 80% en las primeras dos
cohortes. La región tiende a mostrar niveles similares en red territorial y jornadas de
formación, mientras reporta un nivel menor su valoración en “acompañamiento focalizado”.
Mejores herramientas para la convivencia
El Programa es ampliamente valorado por su contribución al fortalecimiento de capacidades
institucionales. Más del 80% de los encuestados/as declara haber mejorado sus prácticas
de gestión, disponer de más herramientas y tener mayor conocimiento para abordar la
convivencia educativa. También es alta la proporción que reconoce el efecto formativo de
las acciones del Programa y se percibe como actor activo en la mejora de la convivencia.
En estas dimensiones, la Región de Coquimbo tiende a mostrar mayores concentraciones
en la categoría “completamente de acuerdo”.
Apoyo para identificar necesidades
Tanto en la macrozona norte como en la Región de Coquimbo se encuentra una alta
valoración en aspectos asociados al enfoque territorial del Programa. Por ejemplo, más del
80% de los participantes está de acuerdo en que el Programa les ha permitido conocer
otras realidades de otras escuelas/liceos de su comuna, identificar necesidades y recursos
comunales, y fortalecer redes de colaboración.
Cuñas:
Rodrigo Caro Mañao, jefe del Departamento de Educación de la Región de Coquimbo: “A
Convivir se Aprende viene a entregar herramientas y fortalecer la capacidad de nuestros
equipos. Hemos implementado el Programa en nueve comunas, tenemos seis pendientes,
pero hemos llegado ya a 70.000 estudiantes en estos tres años de implementación. El
Programa, sin lugar a dudas, en la región ha sido muy beneficioso y lo demuestran los
resultados que ha levantado la Universidad de Chile, lo cual permite dar unas primeras
luces de su éxito”.
María Teresa Ramírez, coordinadora nacional de Convivencia para la Ciudadanía: “Es una
gran alegría ver cómo una política ministerial, como es la Política Nacional de Convivencia,
baja a través del programa A Convivir se Aprende y permea las prácticas regulares de la de
las comunidades educativas”.
“Tener un seminario como el de hoy que nos permite escuchar la experiencia de dos
establecimientos de la Región de Coquimbo que han logrado una mejora en convivencia y,
por tanto, una mejora en los aprendizajes de las trayectorias educativas de los y las
estudiantes es súper emocionante, es una alegría. Y si eso se complementa con analizar
los resultados que nos presenta la Universidad de Chile con la evaluación, es una doble
alegría: Es poder reconocer en los resultados de la evaluación que el Programa tiene efecto
y se percibe como una herramienta de apoyo, que el Programa ayuda a la mejora en
convivencia por un lado y, por otro lado, escucharlo directamente de la comunidad
educativa”.
Pamela Jervis, académica de la Universidad de Chile y jefa del proyecto encargado de
evaluar y monitorear el Programa: “Los principales hallazgos en la región son que existe
una alta valoración de las jornadas de formación, siendo de un 83%, y un 87% valora
positivamente la red territorial”.
“Las comunidades educativas reportan contar con más herramientas y conocimientos para
abordar la convivencia educativa. Más del 80% de los encuestados/as dice haber mejorado
sus prácticas de gestión, tener más herramientas y mayor conocimiento para abordar la
convivencia educativa”.
Gabriel Retuert, académico de la Universidad de La Serena, institución implementadora del
Programa en la Región de Coquimbo: “Hay una responsabilidad importante en la formación
de pregrado tanto en educadores como en profesionales que trabajan en el área
educacional. Nos parece que es un desafío continuar trabajando desde las universidades,
siguiendo tres principios básicos: inclusión, participación y equidad”.
Sebastián Benítez, encargado de convivencia del Kids World School de Coquimbo: “El
Programa ha sido muy importante porque te lleva a la reflexión de cómo tú vas aplicando las
acciones dentro del establecimiento y cómo vas incorporando los elementos de la nueva
política de convivencia educativa, haciendo el análisis de reflexionar cómo va impactando
en nuestros estudiantes”.
“Estos dos años que estuvimos acompañados por el programa A Convivir se Aprende,
fuimos incorporando estos elementos y hoy en día, en el año 2025, vemos un cambio y un
impacto mucho más profundo que el año 2024; cambios que se ven reflejados en los
resultados que hoy nos muestra el equipo de la Universidad de Chile”.

