Durante décadas, Chile ha demostrado su capacidad para producir y exportar frutas y cultivos de alta calidad hacia los mercados más exigentes del mundo. Desde uvas y cerezas hasta arándanos y paltas, el país se ha consolidado como un referente agroexportador gracias a la innovación, la adopción tecnológica y la gestión eficiente de sus recursos naturales.
Hoy, el siguiente paso estratégico es exportar no solo alimentos, sino también tecnología agrícola (AgTech). La experiencia chilena en producción bajo condiciones extremas sequías prolongadas, suelos de alta salinidad y exigencias crecientes de trazabilidad ha impulsado el desarrollo de soluciones de vanguardia en automatización, monitoreo climático y gestión inteligente del agua, con potencial para transformar la agricultura de toda Latinoamérica.
Un ejemplo emblemático de este nuevo paradigma es IMBERT SpA, empresa del ecosistema de innovación de Ovalle, Región de Coquimbo, liderada por Matías Pastén. Con el respaldo de CORFO, el CRDP Coquimbo y SERCOTEC, IMBERT ha desarrollado un sistema modular Plug & Play basado en Inteligencia Artificial (IA) e Internet de las Cosas (IoT) que convierte cualquier invernadero convencional en una infraestructura inteligente y autónoma.
El sistema integra sensores climáticos, controladores automáticos y una plataforma de gestión en la nube, capaces de regular variables críticas como temperatura, humedad, ventilación, riego y nutrición en tiempo real. Mediante algoritmos predictivos, el software analiza datos ambientales y toma decisiones autónomas para optimizar el crecimiento vegetal, reduciendo el consumo de agua y mejorando la eficiencia energética y productiva.
Actualmente, IMBERT SpA busca alianzas estratégicas y capital ángel para expandir su modelo a Chile, México, Brasil y Colombia, mercados que concentran una creciente inversión en innovación agrícola y que funcionan como puentes tecnológicos entre Norteamérica y Sudamérica.
“La Región de Coquimbo tiene una oportunidad única para dejar de ser solo exportadora de alimentos y convertirse en exportadora de conocimiento y tecnología agrícola. La experiencia acumulada en el agro puede generar impacto regional si se conecta con los ecosistemas correctos en México, Brasil o Colombia”, señala Maximiliano Morales, advisor de startups con redes de negocios entre Texas y México, y ex asesor de emprendimientos del programa Startup Chile.
Además del hardware inteligente, IMBERT está desarrollando una plataforma de análisis de datos agrícolas con IA que permitirá generar indicadores de productividad, alertas preventivas y recomendaciones personalizadas para cada cultivo. Esta integración entre hardware, software y servicios en la nube (SaaS) posiciona a la compañía como un actor emergente del AgTech latinoamericano, con una propuesta escalable y adaptable a diferentes climas y sistemas productivos.
IMBERT busca implementar pilotos conjuntos con productores, universidades y centros de innovación, validando su tecnología en distintas zonas agroclimáticas. Su enfoque combina sustenibilidad, eficiencia hídrica y analítica avanzada, aportando una solución integral para los desafíos estructurales del sector agrícola.
Exportar tecnología AgTech desarrollada desde Ovalle no solo diversifica la economía regional, sino que también posiciona a Chile como un hub de innovación agrícola en el hemisferio sur, capaz de ofrecer soluciones escalables frente a los desafíos globales de seguridad alimentaria, cambio climático y escasez hídrica.
Contacto en correo imbertspa@gmail.com y celular 569-3251 7848.

